Boceguillas

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Datos

Distancia a la capital: 80 kilómetros.
Superficie (en Km²): 42,30.
Altitud: 957
Población: 719 habitantes.
Pedanías: Aldeanueva del Campanario, Turrubuelo.
Comarca:Tierras de Sepúlveda.
Lugares de interés: Iglesia de Nuestra del Rosario. Casa blasonada del cardenal Cisneros. Iglesias de Aldeanueva del Campanario y Turrubuelo.
Tradiciones: En las fiestas de San Antonio aún se celebra el 'remate', que es como se denomina en el municipio a la subasta de los palos del Santo y de dulces ofrecidos por los fieles. Además, en las fiestas de la Virgen del Rosario se mantiene la tradición de realizar la ofrenda floral con el traje regional.
Gastronomía: Como en toda la zona, el plato estrella es el asado de cordero. Además cuentan con otras citas, como chocolatadas.
Fiestas: Celebran San Antonio de Padua, el 13 de junio; la fiesta de la Juventud, el primer fin de semana de agosto; Nuestra Señora la Virgen del Rosario, el primer fin de semana de octubre. Las mujeres, además, tienen dos citas especiales: la de Santa Águeda, el 5 de febrero; y la Virgen del Carmen, patrona de la Asociación de Mujeres del municipio, que festejan cada 16 de julio. En Aldeanueva del Campanario celebran su fiesta el 15 de agosto, en honor a Nuestra Señora de la Asunción.
El nombre: Una de las primeras referencias que nos encontramos de la localidad es del siglo XII y aparece como 'Bozichellas'. Según algunos estudios ,su origen es de la raíz 'bos' cuyo significado es buey, con lo que el nombre del lugar puede aludir a la abundancia de este tipo de ganado existente en el entorno durante su fundación.

DESCRIPCIÓN

A través del término municipal de Boceguillas discurren los arroyos de las Vegas y Seco, afluentes del río Duratón, donde puede disfrutarse de unos acogedores rincones poblados por bosques de ribera. En el pago de Prado Castillo han aparecido restos de una villa romana.

Entre los siglos XII y XV Bociguiellas perteneció al alfoz de Sepúlveda, a la vez que permanecía vinculada al ochavo de Bercimuel. Por el centro del casco urbano de la villa discurría el Camino Real de Bayona, lo que le convirtió en una importante villa caminera, disponiendo de numerosas casas de postas, mesones, fondas y posadas. A su término también perteneció el hoy despoblado de San Bartolomé de Sostrajero.

En 1565 el rey Felipe II conceda a Boceguillas el titulo de villa. A mediados del XVII se edificó la iglesia parroquial de Nuestra Señora del Rosario, que es un templo con planta de cruz latina, de una sola nave con cabecera recta y que está flanqueada por dos sacristías de menor altura. En la fachada principal se levanta una espadaña que sirve de campanario. Todo el edificio está construido en mampostería de piedra, con refuerzos de sillería en los zócalos. En la fachada y bajo la espadaña, se localiza la puerta principal, de un arco de medio punto ligeramente rebajado. En el interior podemos destacar sus retablos barrocos, construidos hacia el siglo XVIII, una buena imagen románica y una pila bautismal de la misma época, así como una custodia de sol realizada en Segovia durante la primera mitad del siglo XVII por Sebastián de Paredes, junto con un cáliz rococó hecho por el platero segoviano Ignacio Álvarez Arintero, durante el tercer cuarto del siglo XVIII.
Al término de Boceguillas también pertenecen los lugares de Turrubuelo y Aldeanueva del Campanario. La Iglesia de Turrubuelo se dedica a Santo Domingo y es un edificio de una sola nave de planta rectangular, con muros de mampostería y revoco de cal, que en su interior se cubre con armadura de madera y que conserva su arco triunfal. Se ve claramente que fue un edificio románico, pues su portada de ingreso embellecida por un arco lobulado enmarcado en un bocel, recoge un arco con una imposta decorada con motivos de inspiración vegetal y a cada lado dos columnas con sus correspondientes capiteles. La Iglesia posee una gran torre de planta cuadrada de sillería con ocho arcos de medio punto donde se alojar las campanas.

La Iglesia de Aldeanueva del Campanario es también una sola nave de planta rectangular, destacando la espadaña-campanario, que apoda a la villa. La cabecera poligonal es el elemento más antiguo del templo y parece ser de estilo mudéjar. En la fachada meridional se abre una sobria portada formada por un arco rebajado enmarcado en un alfiz de piedra labrada y rematado con una pequeña hornacina de aspecto barroco. En su interior se conserva un bello cáliz del último tercio del siglo XVI realizado por Juan de la Peña, platero de Burgo de Osma.

Guía Comercial

De Pueblo en Pueblo

De Pueblo en Pueblo, 28/08/2005

Hacia el futuro sobre ruedas

Convertido en un gran área de servicio en plena Nacional I, el censo de Boceguillas no para de crece

Texto y fotografías de Isabel Jimeno.

Las cifras del censo hablan por sí solas en Boceguillas. Aunque en el pueblo son ambiciosos y desean un mayor incremento, lo cierto es que la localidad ha experimentado un gran cambio en los últimos años. Lejos de la capital segoviana y en el nordeste segoviano, la comarca menos poblada, la villa ha sabido sobreponerse a esas dificultades para impulsar un crecimiento que, por el momento, no apunta indicios de tener fin.

Los poco más de cuatrocientos habitantes que integraban el padrón hace un decenio son una cantidad que se ha quedado pequeña ante los setecientos censados, «aunque yo calculo que diariamente en Boceguillas hay unas mil personas viviendo», aclara el alcalde, Alfredo Velasco Barrio.

A esta cifra hay que añadir los centenares de personas que cada día paran en la villa, convertida en una gran área de servicio de la carretera Nacional I que debe estar preparada para atender a todos esos viajeros, además de a los veraneantes, que aquí buscan la habitación de un hostal, una mesa para comer o un taller para poner a punto su vehículo.

Todos estos servicios, además de supermercados, farmacia, colegio y centro médico comarcales a los que acuden desde otros pueblos del entorno, están en Boceguillas y le hacen alentar sus esperanzas de crecimiento en el futuro. «Este pueblo está llamado a que venga mucha gente de la zona. Los pueblos de alrededor no tienen servicios y este tiene de todo», advierte el regidor, que sueña con que en quince años la población ronde los tres mil habitantes.

Servicios comarcales

«Boceguillas tiene mucho futuro, vamos despacio, pero tiene mucho futuro», subraya Alfredo Velasco Barrio, convencido de que en unos años la localidad se convertirá en «una especie de centro de los pueblos de alrededor» gracias los servicios que atesora y que, aunque al Ayuntamiento le supongan un gran esfuerzo económico, están dispuestos a mantenerlos, siempre con la imprescindible ayuda de otras instituciones.

Un futuro que, indispensablemente, está unido a esa situación de privilegio junto a la carretera N-I. «Es fundamental para la vida del pueblo», advierte el regidor. Una gran vía de comunicación que, además de beneficios para el pueblo y su economía con puestos de trabajo vinculados a la carretera, presenta su peor cara con la llegada de las nevadas y heladas que se traducen en decenas de camiones que deben parar en Boceguillas. Por eso, el Ayuntamiento confía en una pronta solución que ponga fin a este problema que se repite cada invierno.

Favorecer la construcción y la creación de más puestos de trabajo, mejorar el deficiente alumbrado público y el asfaltado de algunas calles figuran entre los proyectos municipales, a la vez que se alienta la instalación de nuevas empresas en un polígono industrial «cada vez más demandado».

Los puestos de trabajo ofertados han hecho posible que los jóvenes boceguillenses se queden en el pueblo y otros lleguen al municipio, que tiene en su rejuvenecida población otro motivo para presumir de una alentadora esperanza de futuro.

De Pueblo en Pueblo, 23/07/2006

Gracias a los jóvenes

La juventud de Boceguillas organiza desde hace veinte años una fiesta a comienzos de agosto

Texto de Isabel Jimeno y fotografías de El Norte

Parque infantil durante las festejos de Boceguillas. / EL NORTE

Antes eran las fiestas grandes e incluso, hace años, había toros, pero ahora ya no son tan importantes, sobre todo en afluencia de gente. Siguen siendo las fiestas mayores, para muchos, las más importantes, pero desde hace unos veinte años han cedido protagonismo a unos nuevos festejos promovidos por la juventud.

Y es que en las de la Virgen del Rosario, el primer fin de semana de octubre, el curso ya ha empezado, las vacaciones se han acabado para la mayoría y el frío que en esa época comienza a llegar es un inconveniente para la diversión. Por eso, hace dos decenios, los jóvenes boceguillanos decidieron implantar una nueva celebración que ya está plenamente consolidada.

Así, el primer fin de semana de agosto es importante en Boceguillas, con tres días de fiesta en los que los actos se reducen casi exclusivamente a la noche, sobre todo la del sábado, cuando dos orquestas se toman el relevo sobre el escenario para que la música no pare de sonar desde la medianoche hasta la madrugada, con las calles de la localidad llenas de gente.

Previamente, unas actividades culturales y lúdicas para los más pequeños anuncian la llegada de la Fiesta de la Juventud, que precisamente es sufragada con la aportación de los jóvenes, la colaboración económica de las empresas y la recaudación de la barra del bar que se instala durante esos días.
Aunque no hay nada escrito, también son los jóvenes los que organizan los festejos. De generación en generación, el complicado testigo de coordinar la actividad va pasando de unos a otros. Una asociación mantiene viva la llama de la fiesta, que una comisión se encarga de perfilar cada año.

Por su parte , las mujeres se encargan de las fiestas de Santa Águeda, en febrero, y de la Virgen del Carmen, a mediados de julio. Los jubilados cuentan con su propia asociación, Fuente Cuadrada, y tien un local al que acuden a clases de manuales o gimnasia que este año quieren comenzar a abrir a diario. Y es que cada colectivo se encarga de atender a un sector de la población de Boceguillas.

Los vecinos recorren el municipio en bicicleta en las fiestas patronales

Isabel Jimeno.

Un carácter más entrañable tienen las otras fiestas patronales que se celebran en Boceguillas, donde los habitantes disfrutan de actividades con las que estrechar lazos.

El 13 de junio, los boceguillanos celebran San Antonio, una fiesta que no se ha cambiado de fecha y que siempre marca un día especial en esa fecha en la que se acerca el verano. Normalmente solo es un día de actividades, en el que no falta la paella popular con la que compartir un rato de ocio y conversación con los vecinos.

Y desde hace unos años, el paseo en bicicleta discurre por distintos rincones del municipio, recorriendo. A ratos pedaleando y a ratos andando para salvar los obstáculos, los vecinos, bien provistos de comida y bebida, pasean por las vías y cañadas de Boceguillas para conocer esos rincones que muchas veces pasan desapercibidos.

La cita, cada vez con más éxito de participación, se repite en las otras fiestas patronales, las de la Virgen del Rosario, el primer fin de semana de octubre. Tres días de fiesta en los que además de los importantes actos religiosos, también hay momentos para la diversión con campeonatos de bolos, de chito, de mus o de brisca durante las fiestas y en los días previos.
Y una caldereta el domingo o el lunes, que en Boceguillas es festivo, también reúne a los vecinos. Y un parque infantil con diversas atracciones hace las delicias de los más pequeños en los días de fiesta.
También los más jóvenes de la localidad disfrutan y son los protagonistas de la Cabalgata de Reyes Magos. Tres camellos fabricados en cartón fallero a tamaño natural hace abrir los ojos a los pequeños boceguillanos en un día especial, lleno de magia y cargado de regalos.

De Pueblo en Pueblo, 29/07/2007

Entre barro, piedra y madera

Boceguillas cuenta con un Centro de Investigación de la Arquitectura Tradicional por el que han pasado más de un millar de estudiantes desde el año 2001

Texto de Isabel Jimeno y fotografías de El Norte

Estudiantes del Centro de Investigación de la Arquitectura Tradicional, en plenas prácticas. / el norte

No tiene universidad, pero los universitarios llegan cada verano a Boceguillas para recibir una formación complementaria a sus estudios. Lo hacen en el Centro de Investigación de la Arquitectura Tradicional (CIAT), una iniciativa puesta en marcha en 1996 gracias al acuerdo suscrito entre el ayuntamiento de la localidad y la Universidad Politécnica de Madrid.
Y es que más allá del ladrillo, el cemento, el hormigón o el acero, existen otros materiales de construcción que tuvieron gran importancia en el pasado. Aún hoy algunos de esos edificios se mantienen en pie con su base de arena, piedra y madera, los elementos básicos de la arquitectura popular. Potenciarla y difundirla es el objetivo con el que nació el CIAT, centrado, sobre todo, en la arquitectura castellana, especialmente la del entorno de Boceguillas, que sirve de campo de operaciones para que los estudiantes de Arquitectura conozcan cómo trabajaron sus antepasados gracias al programa de cursos de verano que desde el 2001 se realizan en este centro.

Más de un millar de estudiantes de diferentes universidades han pasado desde entonces por las clases estivales y los talleres de diferente másteres que acuden hasta Boceguillas para impartir sus prácticas sobre arquitectura popular. Y no sólo de centros educativos españoles llegan los alumnos del CIAT. De hecho, este verano, gracias a un convenio con la Universidad Politécnica de Madrid, un grupo de dieciséis alumnos de Arquitectura de Bucarest participa en las visitas y clases teóricas y prácticas de este centro de investigación, que basa su trabajo en difundir y proteger la arquitectura popular.

Aquí conocen cómo se amasa el barro para fabricar adobes, cómo se trata la piedra o cómo se revocaban antes las paredes de los edificios. Restauración arquitectónica, documentación o pintura al fresco son otras de las materias que se pueden aprender en este centro de Boceguillas. La vieja casa parroquial se han convertido en campo de trabajo experimental, laboratorio de materiales y de fotografía, biblioteca y hasta sala de exposiciones en la que observar las formas y materiales de la arquitectura popular.

Patrimonio

La espadaña campanario, elemento más destacado de la iglesia del Rosario

Isabel Jimeno.

A finales del siglo XVIII se remonta la construcción de la iglesia de Boceguillas, cuya edificación hizo que el nuevo casco urbano comenzase a construirse a su alrededor. Dedicada a Nuestra Señora del Rosario, patrona de la villa, se trata de un templo barroco construido en mampostería de pieza caliza y sillería. En el exterior, el elemento más destacado de este edificio que acabó de construirse en el años 1797 es su espadaña, que sirve de campanario y bajo la que se encuentra la puerta principal de arco de medio punto. En el interior, lo más sobresaliente son la cubierta y los retablos barrocos construidos en el siglo XVIII. También cuentan con sus propias iglesias las pedanías de Turrubuelo, que aún conserva restos del primitivo templo románico como la portada, y Aldeanuea del Campanario, cuyo elemento más antiguo es la cabecera, de traza mudéjar.

Fiestas

San Antonio y la Virgen del Rosario

El día 13 de junio es sinónimo de fiesta en Boceguillas, que celebra San Antonio con actos religiosos y una gran paella en torno a la que se reúnen los vecinos, que también participan en una marcha en bicicleta por el pueblo. Una cita que se repite en las otras fiestas, las de la Virgen del Rosario, hace años las más importantes de la villa y en las que incluso llegó a haber festejos taurinos.

Fiestas

Los jóvenes organizan otra

Fue hace dos decenios cuando comenzó a celebrarse y ya está plenamente consolidada tanto entre los boceguillanos como entre los jóvenes que llegan de otros pueblos del entorno. La Fiesta de la Juventud es sinónimo de mucha gente en las calles para disfrutar de estos días en los que la música es el ingrediente fundamental. Unos días antes, los jóvenes también organizan actividades para los más pequeños.

Historia

De Camino Real a autovía

Su ubicación ha determinado buena parte de la evolución de Boceguillas desde su fundación, que se remonta al siglo XI, cuando aparece citado en un texto de Alfonso VI. Primero el paso del Camino Real de Madrid a Bayona y ahora la autovía N-I han permitido que el sector servicios sea desde hace años uno de los principales motores económicos. Ya en el siglo XII había casas de postas, mesones y posadas.

De Pueblo en Pueblo, 10/08/2008

Pueblo de servicios

Las actividades empresariales surgidas junto a la A-1 sustentan la economía y el crecimiento demográfico de Boceguillas

ISABEL JIMENO | BOCEGUILLAS

Parque de la localidad con juegos para los niños. / I. J.

«Villa de Boceguillas, parada y fonda», reza el lema que recibe y despide al visitante que llega a esta localidad al pie de la autovía A-I. Y son muchos los que arriban cada día a este pueblo segoviano del nordeste a través de una de las principales vías de comunicación que atraviesa la provincia. Junto a las casas, la carretera se convierte en el eje de la vida de los boceguillenses, ya que en torno a ella ha surgido una importante y creciente cartera de negocios que sustentan buena parte de la economía local. «Es un pueblo de servicios», apunta el alcalde, Alfredo Velasco. La oferta de puestos de trabajo es grande y permite que Boceguillas no sólo mantenga la población, sino que en los últimos diez se ha incrementado un 25%, gracias, entre otros motivos, a la llegada de extranjeros, que ya suponen casi tres de cada diez habitantes.

Pero no son los únicos nuevos vecinos del municipio de referencia comarcal. La oferta laboral, las buenas comunicaciones y la amplia cartera de servicios educativos, médicos o comerciales también atraen a jóvenes del entorno, que trasladan su residencia hasta Boceguillas, favoreciendo también el incremento demográfico del municipio, pese a que en sus dos pedanías, Turrubuelo y Aldeanueva del Campanario, la cifra habitual de vecinos apenas llega a la veintena entre ambas, pese a que estos días se dispara casi hasta los dos centenares.

Aunque en estos momentos la crisis económica general también afecta a la localidad y ha ralentizado el crecimiento, «Boceguillas va a más», subraya el regidor, quien afirma que las iniciativas empresariales van en aumento. De hecho, entre los proyectos municipales figura la promoción de un nuevo polígono industrial «porque el que hay se ha quedado pequeño», afirma Alfredo Velasco.

Normas subsidiarias

Para ello, el Ayuntamiento modificará las normas urbanísticas subsidiarias, que se han quedado obsoletas, para habilitar suelo industrial y residencial, que también tiene demanda.

Además, Ayuntamiento trabaja en otros y «muchos» proyectos como arreglar el suelo del polideportivo, actuar en los frontones, mejorar el alumbrado de los tres núcleos y continuar pavimentando calles y renovando la red de abastecimiento, a la espera de que se ponga en marcha la depuradora. Y junto con una empresa privada y la cofradía de la Virgen del Rosario mueve los hilos para poner en marcha en una residencia de ancianos, «muy demandada por la población», advierte Alfredo Velasco.

Pendiente de que el Ministerio de Fomento ejecute los trabajos de mejora en el área de servicio y en el aparcamiento de emergencia para camiones en caso de nevadas, el Ayuntamiento está a la espera también de que en octubre comiencen las obras, «muy necesarias», en la estación de autobuses,otras de las actuaciones en marcha en esta localidad por la que cada día, junto con sus vecinos, conviven decenas de habitantes de otros pueblos cercanos y de viajeros de paso, motivo por el que el alcalde considera justificada la demanda de que el centro de guardias médicas cuente con una enfermera todos los días.

De Pueblo en Pueblo, 07/08/2010

Con un gran potencial

En un cruce de caminos, la historia de la villa se escribe junto a la carretera

Paseo de árboles hasta la entrada a la iglesia parroquial de Boceguillas, en Segovia . :: M. RICO

MÓNICA RICO

La historia de Boceguillas desde hace siglos, y aún en la actualidad, se desarrolla en torno a los caminos. Hoy en día su cercanía a la A-1 supone gran parte de su economía como eje y motor fundamental para la localidad, pero esto ocurría ya desde el siglo XII. Por entonces el término fue creciendo en importancia, y parte de su auge estuvo relacionado con el tránsito de viajeros y mercancías del Camino Real de Bayona, que atraviesa el centro del pueblo.

Esta situación estratégica puso a la localidad en la historia. Gracias a esta vía, posterior carretera, muchos personajes ilustres han pasado por la villa. En el año 1517 estuvo el Cardenal Cisneros; y en 1808 fue el propio Napoleón Bonaparte quien pisó Boceguillas. No en vano el municipio era una importante encrucijada de caminos entre Francia y España y en numerosas ocasiones los soldados de las tropas del dirigente paraban a descansar.
También lo hicieron otros personajes algo más desconocidos pero también relevantes, como el Duque de Angulema al frente de la expedición de Los Cien Mil Hijos de San Luis, en el año 1923.

Sin embargo, uno de los episodios más importantes para la historia del municipio ocurrió en 1565, cuando el rey Felipe II convirtió el pueblo en villa, además otorgándole su propia jurisdicción, que hasta el momento pertenecía al término de Sepúlveda.

Varios siglos después, el municipio aún sigue ligado a lo que primero fue la carretera nacional entre Burgos y Madrid y posteriormente se convirtió en autovía. Es un punto clave en la comunicación entre el centro y el norte de España. La conversión en autovía supuso, en parte, un respiro para los vecinos, pues el tráfico dejó de cruzar por el núcleo urbano, aunque se temió que este hecho acabara con el municipio como zona de paso. No fue así y todavía hoy son muchos los que paran a descansar; y ello sin olvidar la importancia de este punto en la operación llamada 'Paso del Estrecho', pues se cuentan por miles los inmigrantes europeos de origen marroquí los que tienen a Boceguillas como punto intermedio en los viajes que realizan hasta sus localidades de origen.

Pero sin duda alguna, el mayor desarrollo de Boceguillas llega de la mano de su gran proximidad a Madrid, ayudada además por las infraestructuras. Aunque ofrece un gran atractivo turístico, éste no se encuentra plenamente desarrollado, por lo que el Ayuntamiento trabaja el impulso de su ubicación como un elemento para atraer inversiones y actividad de todo tipo.

Economía

El sector más dinámico es el ligado a la carretera, con restaurantes, hostales, talleres y gasolinera, entre otros negocios. Una vez consolidada esta parte de su actividad, los esfuerzos municipales se encaminan a diversificar la oferta, tanto de servicios para los vecinos actuales y los potenciales residentes, y dentro de sus posibilidades, con un desarrollo urbanístico ligado al económico. Por ello, el equipo de Gobierno local se afana en consolidar y ampliar las prestaciones que viven por y para la autovía; pero al mismo tiempo busca el modo de ayudar a crear otros nichos de actividad que puedan autoabastecer las necesidades de los habitantes del propio municipio y de los núcleos de los alrededores, en su condición de centro comarcal.

Así, se espera que en el futuro Boceguillas no sea únicamente el lugar de paso en la autovía, sino también una población que ofrece mucho más, primero para el residente, pero también para el turista, que ya cuenta con una amplia oferta de servicios a la que se esperan sumar otros muchos en los ámbitos del ocio, el deporte o la naturaleza. El enclave privilegiado del municipio continuará su historia ligada a la carretera, pero diversificando sus posibilidades.

Álbumes

>>3^er Concurso "Así era mi pueblo" Canal Pueblos de Segovia

>>1^er y 2º Concurso Canal Pueblos de Segovia