Campo de San Pedro

El despegue de la actividad industrial

La instalación de empresas multiplica la oferta laboral en el municipio, que debe luchar contra la falta de suelo urbanizable

Texto y fotografías de Isabel Jimeno.

Con menos de trescientos habitantes (360 contando las pedanías de Fuentemizarra y Valdevarnés), Campo de San Pedro se ha convertido en un punto de referencia para otros pueblos del entorno, más pequeños, que acuden a la localidad casi a diario para hacer uso de sus servicios.

Y con los nuevos proyectos en marcha, el alcalde, José Antonio Martín Martín, confía en que Campo de San Pedro se erija también en un foco de puestos de trabajo para toda la zona. La instalación de una empresa que, de entrada, oferta 45 empleos es el primer paso de lo que se espera sea el despegue industrial del pueblo, que ya baraja la oferta de otras industrias interesadas en fijar su sede en Campo de San Pedro. «Si todo esto cuaja, nos iríamos a multiplicar el trabajo por cinco», advierte el regidor, deseoso de que las iniciativas se hagan realidad y ayuden a mantener la población, tanto en el pueblo como en la comarca.

Además, José Antonio Martín Martín espera que la creación de industrias ayude a superar una de las principales asignaturas pendientes en Campo de San Pedro: el empleo femenino.

Suelo urbanizable

Otro de los caballos de batalla es la necesidad de suelo urbanizable. «Ahora mismo lo que más necesita campo es suelo urbano, que la gente mueva sus terrenos o, si no nos queda más remedio, habrá que urbanizar nuevas zonas que son rústicas ahora, lo que pasa es que también son fincas privadas», advierte el alcalde. «Cada día –añade- llegan dos al Ayuntamiento preguntando por viviendas para comprar o alquilar, pero no hay solares que se vendan, ni casas que se vendan o alquilen».

La inminente construcción de 23 casas y el proyecto para la edificación de otras quince ayudarán a solucionar los problemas de vivienda en la localidad. Y es que en el Ayuntamiento esperan que la falta de suelo en venta para construir no limite las buenas perspectivas de futuro de Campo de San Pedro ahora que la actividad industrial comienza a despegar. Otro futuro bien distinto parece esperar a las pedanías de Fuentemizarra y Valdevarnés, mucho menos habitadas y con una población más envejecida.

Buitres

Aunque su paisaje poco tiene que ver con los cercanos Parques Naturales de las Hoces del Río Duratón y del Río Riaza, Campo de San Pedro también puede disfrutar de los buitres que habitan en estos privilegiados enclaves de la provincia. El vertedero de cadáveres de animales que existen en el municipio es un reclamo para las decenas de rapaces, que acuden aquí a comer, haciendo las delicias de los aficionados a los alimoches, los buitres negros y los buitres leonados, que aquí pueden fotografiar a su antojo a los animales.

Ahora, la Asociación Amigos del Buitre trabaja en la construcción de un museo en Campo de San Pedro en el que dar a conocer los secretos de estas rapaces.

La ronda de San Juan

Los niños de Campo de San Pedro mantienen la tradición de recorrer las calles del pueblo el 24 de junio cantando una serenata

Texto y fotografías de Isabel Jimeno.

Con las nuevas aficiones, los juegos infantiles ya apenas dejan ver a los niños por las calles, que ahora prefieren el ordenador, y es difícil que las tradiciones que sus padres y abuelos cumplían sigan en pie. Pero esto no ocurre en Campo de San Pedro. Es cierto que algunos ancestrales usos se han quedado por el camino del olvido, pero otros todavía perviven y llenan de alegría, añoranza y nostalgia las calles del pueblo.

Los pequeños de la localidad son los encargados de hacerlo posible. Llega el verano y con él, no solo trae más tiempo para jugar y descansar, más calor y más horas para estar con los amigos.
El estío también hace posible que en Campo de San Pedro la mañana de San Juan vuelva a ser especial. Cada 24 de junio, los niños de entre cuatro y nueve años llenan con su tradicional canción las calles del pueblo. Como antes los hicieron sus progenitores y antes sus abuelos, recorren las casas con su peculiar melodía.

Pero la serenata no es gratuita. Los pequeños piden una compensación por su actuación. Pero no a cualquier precio. Los vecinos también son exigentes para entregar la compensación por la serenata para que la tradición persista. Los niños deben esforzarse en hacerlo lo mejor posible para que la compensación económica sea más cuantiosa y así obtener una mayor recaudación que les permita compartir una comida mejor.

Y es que cuando la música se silencia, los pequeños de Campo de San Pedro siguen con su peculiar fiesta con una comida para ellos gracias a los beneficios obtenidos por la tradicional serenata que recuperan cada año y con la que el pueblo se despierta cada 24 de junio.
Por su parte las mujeres también celebran su fiesta y se unen a comienzos de febrero para honrar a Santa Águeda y, de paso, pasar un día diferente en compañía del resto de sus vecinos.

San Isidro
Y el 15 de mayo en Campo de San Pedro, como en otros muchos pueblos de la provincia, también celebran San Isidro Labrador. La cofradía del patrón de los agricultores es la encargada de organizar los festejos con misa y procesión por la mañana.

Cuando acaba el recorrido por las calles del pueblo, cumplen con la tradición del denominado ‘remate’ de los palos de las andas del santo y de las tartas y dulces que ofrecen los vecinos.
Y es que más que una fiesta solo de los agricultores, San Isidro es una fiesta de casi todo el pueblo pues muchos están relacionados con este oficio y más de doscientas personas integran las cofradía del santo.

Jóvenes y mujeres colaboran en la organización de actividades     Carretera de entrada al municipio segoviano de Campo de San Pedro. La asociación que antes se encargaba de coordinar y organizar las actividades culturales y de ocio antes de las fiestas mayores en honor de Nuestra Señora de la Asunción y San Roque, el 15 y 16 de agosto, supuso un ligero inconveniente, pero no ha supuesto el fin de los juegos infantiles o los campeonatos. Aunque sin un colectivo oficial que les agrupe, los vecinos siguen colaborando en la organización de actividades. Las madres son quienes ponen en marcha juegos y competiciones infantiles la semana antes de los días grandes de Campo de San Pedro y los jóvenes tampoco dudan en echar una mano al Ayuntamiento para organizar los clásicos campeonatos de mus, de frontenis, de tiro al plato o de fútbol sala del 14 al 16 de agosto. Por su parte, el Consistorio se encarga de otros aspectos como las verbenas o la exhibición de pelota a mano que este año, por segunda vez, ha vuelto al programa de festejos para hacer las delicias de los vecinos, aficionados a ver este deporte, porque a la hora de practicarlo ahora prefieren el frontón. La actuación de ‘Los Teo’ a través del programa de Difusión Cultural de la Diputación Provincial servirá de aperitivo a las fiestas el 13 de agosto. Y ya el 14 y el 15 verbena, a cargo de la orquesta que anima las noches de Campo de San Pedro después de unas mañanas reservadas a los actos religiosos y unas tardes cargadas de actividades con juegos y competiciones deportivas.

Bendición para el agua

Los jóvenes ponían en las tierras ramos bendecidos el día de San Pedro

Texto y fotografías de Isabel Jimeno.

En su nombre hace honor a un santo, pero las de San Pedro ya no son las fiestas más importantes de Campo de San Pedro. Con misa y procesión celebran San Pedro Advíncula, patrón de la iglesia. Pero las del otro San Pedro, el mártir, ya solo se conservan en el recuerdo de los mayores.

Antes, el 29 de abril, era día de fiesta en este pueblo del nordeste segoviano, recuerda Elvira, una de las veteranas mujeres que vive en la localidad. Era un día de fiesta, sobre todo para los jóvenes, que participaban activamente en cumplir con la tradición aprendida de sus antepasados.

Diversión y trabajo, porque el ritual también incluía un pequeño esfuerzo para ir hasta un plantío cercano a cortar los ramos que luego eran bendecidos en la iglesia. Y por la tarde, esos mismos jóvenes recorrían los campos de labor de un pueblo eminentemente agrícola y en cada tierra colocaban uno de esos ramos para que protegiesen la cosecha hasta su recogida.

Y después de una jornada de trabajo, momento para el disfrute. El baile en el salón ponía punto y final a una tradición que ya ha desaparecido.

Animales por San Antón

Lo mismo ocurrió con otra de las fiestas que Elvira guarda en su recuerdo, como la de San Antón, en la que también se bendecían la harina y los cereales que utilizaban para alimentar al ganado.

Y como parte importante en las labores del campo, los animales también recibían su bendición en la festividad de San Antón. El 17 de enero, los vecinos llevaban a los machos a la ermita de Nuestra Señora de la Paz, donde recibían su bendición.

Pero esa tradición se perdió hace años. De hecho, ya ni siquiera queda la ermita de Nuestra Señora de la Paz. Y es que aunque el inmueble aún se conserva, con su venta ahora es utilizado por sus propietarios particulares para otros fines que poco tienen que ver con sus primeros orígenes destinado el culto.

Cabecera de comarca

Campo de San Pedro ha tenido una importante actividad industrial destacada en el comercio de cereales

ELENA RUBIO ARAGONESES

Situada en el nordeste de la provincia, Campo de San Pedro es hoy en día un punto de referencia para otros pueblos del entorno que acuden a la localidad a hacer uso de algunos servicios. Y es que Campo de San Pedro es cabecera de comarca y tiene un respetable número de empresas asentadas en su término municipal que dan trabajo a un buen número de vecinos.

Hoy en día no debería sorprender este hecho ya que desde hace muchos años Campo de San Pedro ha tenido una actividad industrial destacada por el comercio de cereales que mantenía con localidades como Aranda de Duero o Riaza. En la actualidad, todavía se pueden contemplar algunos silos para el almacenamiento del grano.

Este no es el único patrimonio industrial que se puede contemplar en Campo de San Pedro. En el núcleo de Valdevarnés, perteneciente a Campo de San Pedro, también hay un conjunto de bodegas construidas a finales del siglo XIX en la ladera del pueblo y cerca de la iglesia. Muy cerca del templo también se encuentran las ruinas de un antiguo lagar.

Sillería de calidad

Y si se habla de patrimonio sacro, el más destacado que tiene Campo de San Pedro es la iglesia dedicada a San Pedro Advíncula. Es un templo de tres naves rematado con una cabecera cuadrangular y torre adosada en el lado norte. Para construir la cabecera se utilizó sillería de gran calidad, mientras que para la nave se usó mampostería reforzada con sillares almohadillados en esquinas y vanos.

Se accede al templo por el lado sur a través de una portada barroca presidida por una imagen de San Pedro de cuerpo barroco y cabeza románica. En el interior, el conjunto de imágenes barrocas es magnífico y muy representativo de las devociones tradicionales de la comarca. Pero ante todo destaca el retablo mayor de estilo clasicista, del último cuarto de siglo. Está dividido en cinco calles. En las laterales externas aparecen seis cuadros de Gabriel de Sosa, pintados hacia 1.584. Representan la Anunciación, la entrega de llaves a San Pedro, Cristo en la columna, el Nacimiento, Cristo llevando la cruz y Cristo resucitado. También es destacada la capilla mayor que por su tipología podría fecharse en la primera mitad del siglo XVI.

Y es que Campo de San Pedro es un pueblo cuya historia se remonta al año 1.247. Por aquel entonces se la menciona como Santa María del Campo, por lo que se cree que los repobladores de estas tierras procedían de la localidad burgalesa de Santa María del Campo. Con el paso de los años el nombre fue evolucionando hasta que en el siglo XVI se denominada a la localidad como Campo de Maderuelo, por pertenecer a esta Comunidad de Villa y Tierra. No sería hasta el siglo XVIII hasta que no tuviera su denominación actual.

Fiestas

Precisamente estos días Campo de San Pedro está estos días de fiesta con motivo de la celebración de las fiestas patronales en honor a la Virgen y San Roque. Unas jornadas en las que no faltan los actos religiosos y las actividades lúdicas, para niños y mayores y la animación musical por las noches. La diversión también se puede encontrar el fin de semana que se celebra la Feria Comarcal del Nordeste de Segovia. Unas jornadas en las que se pueden contemplar los diferentes productos que se elaboran en esta parte de la provincia, así como representaciones teatrales, exposiciones o exhibiciones de pelota a mano.

Ejemplo de desarrollo rural

La Feria Comarcal de Muestras es un exponente del potencial de la zona

MÓNICA RICO

Plaza principal de la localidad. :: M. RICO

Hace tan solo unos meses que la localidad de Campo de San Pedro estuvo en el punto de mira de toda la provincia por la posibilidad de que la localidad pudiera albergar el denominado cementerio de residuos nucleares. Aunque muchos recuerdan aún el movimiento vecinal de aquellos días, parecen formar parte de un pasado lejano y hoy la calma y la tranquilidad que habitualmente se respiran en el municipio, vuelve a regar las calles, más animadas en época estival.

Campo de San Pedro es hoy un referente dentro de la comarca nordeste de la provincia. Se trata de un lugar con importancia también dentro de la historia, que se remonta al siglo XIII, cuando la localidad se llamaba Santa María del Campo. Con el privilegio otorgado por Felipe IV, que le concedió jurisdicción y picota, pasó a ser villa. Por entonces el nombre había cambiado a Campo de Maderuelo, localidad de la que dependía jurisdiccionalmente. Fue en el siglo XVIII cuando cambió a su nombre actual.

En torno a la ermita

La historia nos sitúa la creación del municipio en torno a la ermita de Nuestra Señora de la Paz y un crecimiento posterior que consiguió la creación de tres barrios más, que en la actualidad se han convertido en dos, a los que se suman las anexiones de las localidades de Fuentemizarra y Valdevarnes. La historia ha acabado situando a Campo de San Pedro en el centro de una comarca, y la localidad ha sabido cumplir con las expectativas y en muchos aspectos funciona como tal.

Muestra de ello es la celebración anual de su feria de muestras, dedicada a toda la comarca nordeste de Segovia. La iniciativa hoy ya es una cita consolidada y todo un éxito de participación y público. Nació con el propósito de ser una muestra de la realidad económica, social y cultural de la zona, además de un lugar de encuentro y promoción para asociaciones, empresas y emprendedores y con el tiempo convertirse en referente de identidad comarcal. Y lo ha conseguido.
El certamen se ha convertido en una plataforma para la promoción de un territorio con identidad propia, capitaneado por Campo de San Pedro.

Dentro de la variada programación de actos que en cada edición acompaña al certamen, destaca la entrega de premios al desarrollo rural 'Macario Asenjo Ponce', en el que empresas de la comarca y de todo el territorio nacional presentan sus proyectos de implantación y desarrollo en el medio rural.

Para mayores y pequeños

Además de a través de esta feria, el municipio de Campo de San Pedro lucha diariamente por el desarrollo en el medio rural y en la comarca nordeste. En el municipio tiene su sede la asociación Codinse (Coordinadora para el Desarrollo Integral del Nordeste de Segovia), y se está ejecutando un Centro de Día que tratará de mejorar la vida de los ancianos de la zona.

La construcción pretende concluir y abrir sus puertas en los próximos meses y junto a la misma se unirá una segunda construcción, ya que en estos momentos está en marcha la primera fase de la realización de una residencia asistida de personas mayores, uno de los proyectos clave para el futuro del municipio, que logrará mantener y estabilizar población a la vez que crear empleo, bases necesarias para el desarrollo en los pequeños municipios.

Las iniciativas no faltan y una de las últimas ha partido de los padres de la localidad, que han buscado una alternativa de clases y talleres para que los niños aprendan y disfruten en verano. Con la colaboración del Ayuntamiento y sus propios recursos han conseguido conciliar la vida laboral y familiar durante el período estival. Sin duda gracias a este tipo de iniciativas se consolida la población en el medio rural y Campo de San Pedro es un ejemplo de coordinación y potencial para el desarrollo de la zona.