Apuesta ambiental
Peque desarrollará un plan turístico que incluye la conservación de su zona natural
M. García.
Dinamizar la localidad a través de iniciativas de promoción del turismo rural de la zona es uno de los objetivos que la nueva Corporación municipal de Peque se ha fijado para el actual mandato.
Su alcaldesa, Pilar Otero Lobato, explica que «dado los ecosistemas fluviales que mantenemos en buen estado, como son el río Negro o el de La Ribera o Fontirín, estamos enmarcados dentro de la red Natura 2000, como una zona de interés comunitario». Dentro de esta iniciativa se encuadra, además, el programa Life Naturaleza, instrumento financiero de la Unión Europea para desarrollar acciones encaminadas a la conservación de especies y hábitats de interés comunitario, y en él se enmarcarán las distintas acciones que prevé el Ayuntamiento de Peque para contribuir a la conservación de la náyade o mejillón de río, que se encuentra en el río Negro de la localidad «y es uno de los pocos hábitats en los que existe este molusco», apunta la edil.
En este camino de promoción turística y conservación natural, el Ayuntamiento tiene entre sus proyectos la colaboración con las instituciones para promover la ejecución de un Centro de Interpretación del río Negro, que se ubicará en el bello paraje del molino de La Charrina, que será restaurado con cargo a fondos del mencionado proyecto.
La institución local también tiene en mente promover la construcción de casas rurales o centros de turismo rural, unidos a la redacción de memorias y proyectos encaminados a abrir rutas de senderismo y de bicicleta, que comuniquen las dos orillas del río Negro. «Para conseguir este objetivo necesitaremos la restauración del puente de Oterino, que tiene más de 400 años», asegura la alcaldesa, Pilar Otero.
Además de apostar por el desarrollo turístico, Peque también quiere incentivar el crecimiento urbanístico , por lo que desde su Ayuntamiento «se pondrá especial interés en poner a disposición de los interesados terrenos para que puedan construir».
Consciente de las dificultades que para un Ayuntamiento pequeño supone conseguir fondos, Peque buscará autofinanciación a través del aprovechamiento de las energías renovables, entre otras opciones.
La localidad espera contar con Internet de alta velocidad y autobús
M. García / Zamora
Entre las carencias que Peque pretende solucionar se encuentra el estado de sus comunicaciones. Su alcaldesa explica que desde el Ayuntamiento ya se está trabajando para solventar este problema, tanto en lo que se refiere a comunicaciones viarias como en el área de las telecomunicaciones. «Esperamos, en fechas no lejanas, disponer de Internet de alta velocidad y que nuestras comunicaciones móviles mejoren también en la misma medida», subraya Otero.
Otra de las demandas vecinales que la institución local pretende solventar es la de un autobús de línea, «algo que esperamos que con el esfuerzo de todos podamos lograr, de momento ya nos hemos encontrado buena disposición por parte de la Junta de Castilla y León para conseguir que la gente pueda disponer de un medio de transporte, con el que hasta ahora no ha contado», explica la edil.
Otra de las áreas de trabajo para el Ayuntamiento de Peque se centra en la reforma de sus edificios municipales. Desde su Alcaldía se espera poder contar con fondos para rehabilitarlos y poder ejecutar las obras necesarias, en breve.
Tampoco quieren descuidar la imagen del municipio por lo que, entre sus proyectos para este mandato, destaca la construcción de jardines y mejora de los ya existentes, el acondicionamiento de dos lagunas naturales ubicadas dentro del pueblo, y la mejora de la pavimentación de las calles de la localidad.
Para conseguir materializar todas estas iniciativas, desde el Ayuntamiento de Peque se pide ayuda a todas las administraciones «para salir del abandono y la incomunicación», y también al sector empresarial «pidiendo que inviertan en el desarrollo de este pueblo» así como a sus vecinos.
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