Vías de financiación
Fuente Encalada renovará su red de suministro de agua, al tiempo que busca fondos para la reparación del tejado de su iglesia
Texto de M. García. Fotografías de El Norte.
Los escasos recursos municipales con los que cuenta esta población, con apenas 138 habitantes, no son una traba, sin embargo, para que su Ayuntamiento se esfuerce cada año en buscar vías de financiación para poner en marcha distintos proyectos de mejora.
Uno de ellos es la construcción del nuevo camposanto de la localidad, cuyas obras comenzaron el pasado año y han concluido hace unos meses. El cementerio se ha financiado a través de los fondos de los planes provinciales de la Diputación y cuentan con 33 nichos, de los que los vecinos ya han adquirido 26, según datos municipales. Para completarlo solo falta llevar hasta la zona el servicio de agua y de luz, según explica el alcalde, José Antonio Colino Barrero. También los planes provinciales servirán este año para acondicionar la zona donde se ubica el depósito de agua del pueblo, «que se encuentra muy deteriorado», así como las tuberías que conforman la red de suministro y que tienen más de tres décadas de antigüedad. «Nuestra red es de uralita y ya nos está causando muchos problemas, por eso es una prioridad su renovación, aunque tendremos que llevar a cabo estos trabajos en distintas fases, ya que solo nos han dado 37.000 euros y este dinero es escaso», asegura.
En proyecto se encuentra también el asfaltado de distintas calles del pueblo. En el ámbito patrimonial se plantean la forma de conseguir financiación para reparar el tejado de su iglesia parroquial, «muy deteriorado y con goteras». Este es el principal edificio del pueblo, que posee un peculiar porche renacentista, cuyas columnas con capiteles sustentan una magnífica armadura morisca. También es digna de mencionar la portada del templo, decorada con medallones, y la puerta, en cuyos cuarterones pueden contemplarse los cuatro evangelistas, los apóstoles y una Anunciación. Destaca, asimismo, su retablo mayor, realizado por un discípulo de Becerra. En arquitectura civil, el pueblo posee numerosas bodegas subterráneas, localizadas en la subida con dirección a La Bañeza. En cuanto a sus vías de comunicación, el munícipe afirma su «satisfacción» por el arreglo que las administraciones han llevado a cabo en el firme de su carretera, aunque, asegura, «nos gustaría que, en próximas mejoras, quitaran una curva en esta vía».
Para Fuente Encalada el mantenimiento de sus carreteras es vital, ya que sus vecinos tienen que desplazarse a otras localidades para acceder a comercios, ya que el pueblo no cuenta con ninguna tienda, aunque sí con venta ambulante que facilita a sus habitantes productos básicos durante la semana.
Los jubilados financian la construcción de su local social
M. García / Zamora
La Asociación de Jubilados ‘El Castro’ de Fuente Encalada se encuentra trabajando en un ambicioso proyecto para la adecuación de un local propio, que les sirva de sede de cursos, lugar de reuniones y de ocio.
A través de los fondos del colectivo, donados por una vecina del pueblo, se financiarán las obras de adecuación de una panera conseguida por la agrupación a través de una permuta de su antiguo local. El secretario de la asociación, Pedro Delgado, explica que «además de esta panera, el Ayuntamiento nos ha donado una casa vieja y nuestra idea es proceder al derribo y al inicio de las obras, en breve». Una vez finalizado el proyecto, la intención de la asociación es ampliar su programa de actividades anuales, mermado ahora por la falta de local propio. «Hasta ahora se está haciendo un curso de gimnasia de mantenimiento, y no podemos contar más actividades hasta que no tengamos nuestra sede, entonces ya añadiremos nuevas iniciativas y acondicionaremos el local como sala de reuniones y lugar de juegos», subraya el secretario.
La Asociación de Jubilados El Castro se creó hace siete años y en la actualidad agrupa a 42 socios. El objetivo de la iniciativa era ocupar el espacio dejado por una antigua asociación cultural, que paralizó sus acciones. «En aquel momento yo era alcalde del pueblo y viendo la necesidad de seguir contando con actividades, propuse a la gente la creación de un nuevo colectivo y los vecinos se animaron a colaborar», apunta Delgado.
El secretario de la asociación apunta la calidad de vida de la que se disfruta en Fuente Encalada, aunque echa de menos la existencia de un censo municipal más amplio y, sobre todo, la permanencia en el pueblo de los jóvenes, ya que la mayoría viven fuera al no haber ninguna industria en este municipio.
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