*

Fuentidueña

Datos

FuentidueñaDistancia a la capital: 59 kilómetros.
Superficie: 50,50 kilómetros cuadrados.
Altitud: 865 metros.
Población: 142 habitantes.
Comarca: Tierras de Cuéllar.
Lugares de interés: El pueblo está declarado como Conjunto Histórico de Interés Cultural. Entre su rico patrimonio destaca la iglesia parroquial de San Miguel. Es un espléndido templo del románico, que tiene un excelente pórtico de ocho vanos en el lado norte y un magnífico ábside semicircular. Lo más destacado reside en los capiteles de su nave con una gran variedad temática. Ruinas de la iglesia de San Martín y la necrópolis. También destacan la muralla medieval con sus tres puertas de entrada, el puente de piedra y las ruinas del Hospital de la Magdalena.  Son magníficas y espectaculares las rutas al embalse de las Vencías y la del mirador de San Blas.
Gentilicio: Fuentidueñeros.
Tradiciones: La víspera de la festividad de la Inmaculada, es tradición que los jóvenes recojan leña para después quemar en una gran hoguera que se realiza en la puerta de la iglesia de Santa María La Mayor, donde después los vecinos disfrutan de una rica parrillada de chuletas.
Curiosidades: El ábside de la iglesia de San Miguel fue trasladado a Nueva York, donde permanece, reconstruido a partir de sus 3.300 piedras numeradas.
Gastronomía: Durante las fiestas y la semana cultural se realizan citas gastronómicas para todos los vecinos como parrilladas, concursos de tortillas o croquetas, chocolatada y paellada. Es típico en la localidad el lechazo asado, además del pato asado, las chuletas de cordero y los productos elaborados de la matanza casera. Una bodega produce vino en la localidad con el nombre de su castillo.
Fiestas: La villa celebra San Miguel, el 29 de septiembre; La Concepción, el 8 de diciembre, y una semana cultural en agosto con actividades para todos los públicos.

 

DESCRIPCIÓN

Los orígenes de Fuentidueña son prerromanos, pues en su entorno se localizó una necrópolis de época celtibérica. Así mismo de época romana hay constancia de la existencia de una villa y de un asentamiento rústico a su alrededor. Sus tierras fueron repobladas en el siglo XII por el rey Alfonso VIII, trayendo para ello pobladores burgaleses procedentes de las tierras de Oña. Su nombre en 1135 era Fontedona, y en el siglo XV llegó a ser señorío de don Alvaro de Luna, para pasar posteriormente a ser posesión de los condes de Montijo. A mediados del siglo XVI Fuentidueña contaba con una morería o barrio morisco, que según se cree estaba en el arrabal de Santa Cruz. Dentro de su término también se sabe que existen dos despoblados, conocidos como La Serranilla y Valcavado del que todavía se intuyen las ruina de su iglesia. Fuentidueña fue la cabecera de su comunidad de Villa y Tierra, a la que pertenecían otras veinte poblaciones y de la que todavía se conserva su casa de comunidad en la Plaza Mayor del pueblo.

Dada la estratégica situación de la villa, esta sería fortificada en los inseguros siglos XII y XIII, por lo que aún hoy veremos algunos restos del que fuera su castillo, las murallas, algunas torres y la puerta de Alfonso VIII. Próxima a esta puerta también veremos alrededor de las ruinas de la iglesia de san Martín, una necrópolis de tumbas antropomorfas excavadas en la roca, que se fecha entre los siglos X y XII.
La iglesia parroquial de san Miguel es un espléndido templo del románico segoviano, cuya planta se organiza en una sola nave a la que en el siglo XVI se la añadieron dos capillas laterales, y que se cubre con bóveda de medio cañón. Cuenta con un excelente pórtico de ocho vanos en el lado norte con columnas geminadas, una bella portada occidental formada por cinco arquivoltas, y un magnífico ábside semicircular con cuatro columnas entregas, tres ventanales y un bello repertorio de canecillos figurados. Pero el interés especial de esta iglesia reside en los capiteles de su nave por su variedad temática, con escenas de tipo religioso poco frecuentes en tierras segovianas, que se inspiran directamente en el monasterio de santo Domingo de Silos. Pieza extraordinaria es asimismo el retablo mayor de estilo barroco, relacionada con el famoso escultor renacentista Bartolomé Ordóñez que conserva una imagen de la Virgen sentada con el Niño Jesús en su regazo. En la capilla del marqués de Prado se guarda una buena escultura de Cristo Crucificado del siglo XVII.

Dentro del pueblo que es Conjunto Histórico declarado de Interés Cultural, podemos ver la portada del gótico tardío del palacio de los condes de Obedos (hoy en proceso de rehabilitación) y las lamentables ruinas del Hospital de la Magdalena fundado por doña Mencía de Mendoza, esposa del señor de la villa don Álvaro de Luna Manrique, cuya fachada plateresca se trasladó a la iglesia de Calabazas de Fuentiduela.

Ya en lo bajero del pueblo, junto al río Duratón, se encuentra la iglesia de Santa María la Mayor o del Arrabal, también de época románica, que conserva dos sencillas portadas de este estilo artístico. En el interior destaca un retablo gótico de finales del siglo XV, y los dos tardomanieristas de san Sebastián y san Pedro con pinturas de Simón de Escobar Mansilla. Próximo al mencionado río empieza el camino de cruceros de piedra que termina en el convento franciscano de san Juan de la Penitencia. Por otra parte, salvando las aguas del río Duratón también podemos contemplar un buen puente medieval con su característico perfil de "lomo de asno”.

En 1958 se vendió al Museo Metropolitano de Nueva York 'The Cloisters' de Nueva York lo que quedaba de la iglesia de san Martín (cabecera y presbiterio), a cambio de parte de los frescos de san Baudelio de Berlanga hoy en el Museo del Prado, y de la restauración de la ya mentada iglesia de san Miguel.
Dentro de los entornos de Fuentidueña, se localiza el conocido como 'segundo tramo de las Hoces del Río Duratón', el embalse de las Vencias y las Cuevas y manantial del Salidero.

Los Valles de Fuentidueña es población aneja al termino de esta villa, y en ella podemos admirar su pequeña iglesia parroquial, que por algunos elementos que se intuyen en su torre cabecera y en su portada, nos hacen pensar que también fue románica. 

 

UN APUNTE HISTÓRICO

Fuentidueña en el siglo XIX: Entre 65 y 70 había en Fuentidueña a mediados del siglo XIX según describe Pascual Madoz en ‘Diccionario geográfico-estadístico-histórico de España’. Destaca la existencia de cárcel y dos hospitales, uno dentro de la población y otro extramuros de peregrinos. 20 niños y 6 niñas acudían a la escuela de instrucción primaria. Regado por las aguas de río Duratón y el arroyo Fuentes, sus gentes podían pescar barbos y anguilas y cazar en el término conejos, liebres y perdices. Mantenían ganado vacuno, asnal, caballar y mular y cultivaban trigo, cebada, centeno y bastante fruta. En aquella época había 59 vecinos y «126 almas».

Guía Comercial

 

 

 

De Pueblo en Pueblo


 


 


 


 


 
© EL NORTE DE CASTILLA S.A.
Registro Mercantil de Valladolid, Tomo 356, Folio 162, Hoja VA1.044, Inscripción 52.
Domicilio social en c/ Vázquez de Menchaca, 10, 47008 - Valladolid
C.I.F.: A47000427

Vocento

Enlaces:
Noticias de Segovia
Tierra de Sabor
Correo electrónico de contacto
Copyright © El Norte de Castilla S.A., Valladolid, 2019. Incluye contenidos de la empresa citada, del medio El Norte de Castilla, y, en su caso, de otras empresas del grupo de la empresa o de terceros.